Yanett Gallegos, Directora de Investigación, Desarrollo y Procesos de Altus Biotech, ha participado en la conferencia Atención al Decreto para Prescindir del Glifosato en México, invitada por el Conahcyt.
A continuación les dejamos su comparecencia:
Atención al Decreto para Prescindir del Glifosato en México. Resultados científicos: Es posible producir alimentos sin agrotóxicos, alternativas viables al glifosato.
A nivel mundial, se observa un aumento en la demanda de bioinsumos, con un enfoque particular en los bioherbicidas, para atender a las más de 93 millones de hectáreas mundiales que producen alimentos sin el uso de glifosato y otros agrotóxicos.
Los bioherbicidas representan una alternativa viable al glifosato en la industria agrícola mexicana, ofreciendo una solución amigable con el ambiente y sin riesgos para la salud humana. Sin embargo, su adopción a gran escala enfrenta varios desafíos que requieren la colaboración y el apoyo de todos los sectores para superarlos y aprovechar su potencial en beneficio de la salud de las y los mexicanos, en torno a un objetivo común: nuestro bienestar colectivo.
El Modelo Mexicano de Innovación Soberana para el Bienestar del Conahcyt logró articular un esfuerzo multidisciplinario, interinstitucional e intersectorial para atender de manera coordinada y conjunta lo establecido por el Decreto presidencial publicado el 31 de diciembre de 2020. En este contexto, se han puesto en marcha una serie de acciones orientadas al fomento del uso y desarrollo de bioherbicidas, al mismo tiempo en que se exploran alternativas disponibles en el mercado nacional e internacional. Este esfuerzo implicó el mapeo de actores relevantes, personas científicas y tecnólogas, empresas, productores y colectivos sociales, estableciendo mecanismos efectivos de transferencia tecnológica a diferentes niveles, con el objetivo de garantizar el abastecimiento de diferentes bioinsumos que atiendan las demandas nacionales, tanto comunitarias como industriales.
Se han identificado diversos bioherbicidas disponibles en el mercado internacional, entre los que se incluyen productos como: Beloukha, Burn Out Fórmula 2 y Weed Zap, los cuales ya cuentan con aprobación tanto en la Unión Europea como en los Estados Unidos. La coordinación estrecha con la Secretaría de Economía resulta fundamental para agilizar los procesos de importación y comercialización de estos productos en México, cuidando y privilegiando a las empresas de base científica y tecnológica 100% mexicanas.
En nuestro país, al menos tres bioherbicidas están disponibles ya en su formulación comercial final y se encuentran por iniciar su proceso de aprobación regulatoria. Estos bioherbicidas representan una opción de corto plazo, y su fabricación y comercialización están a cargo de pequeñas y medianas empresas mexicanas.
Bajo la coordinación del Conahcyt, se apoyaron varios esfuerzos que generaron formulaciones óptimas con efectos bioherbicidas que consideran la eficacia agronómica y perfiles toxicológicos y eco-toxicológicos que cumplen con los estándares de la normativa mexicana. Además, se están implementando procesos de escalamiento industrial que garantizan la eficacia y costos adecuados desde el laboratorio hasta el campo. De estas formulaciones, tres tienen aplicación industrial y han sido sometidas a pruebas exhaustivas en 1,000 unidades de producción en 18 estados de la república. Una de ellas ya ha sido aprobada recientemente por Senasica y está en proceso de someter su dossier de aprobación frente a la Cofepris. El resto se encuentran listos para iniciar su proceso de aprobación regulatoria.
La capacidad inicial de producción de estos bioherbicidas 100% mexicanos es de 3.6 millones de litros/año, capaz de incrementarse mediante alianzas de transferencia de tecnología entre estos actores del sector privado verdaderamente comprometidos con el país, los cuales hoy represento.
Por tanto, seguir impulsando de manera decidida la consolidación de los bioherbicidas desarrollados en el país, así también como otros bionsumos, es fundamental para ofrecer a la población alternativas seguras. Además, esto permitirá el fortalecimiento de una industria mexicana con potencial para posicionarse sólidamente también en el ámbito internacional. La colaboración entre el Gobierno de México y el sector privado resulta clave para garantizar el éxito y asegurar que los beneficios lleguen a las y los mexicanos. En la industria mexicana de bioinsumos estamos comprometidos a seguir contribuyendo y colaborando de manera decidida por el bien de México. Muchas gracias.
